viernes, 17 de julio de 2015
Maternidad y creación
No creo que haya que escoger entre la maternidad y la escritura o entre la maternidad y la vida. Si se domina la cuarta dimensión, la del tiempo, uno puede escribir en un solo minuto -si está suficientemente inspirado- el poema más bello de la creación, el haikú dictado por los dioses, la bola de cristal. También es un error pensar que la mujer ha de renunciar al amor físico a cambio del amor abstracto.
Como decía Epicteto, si uno tiene suficiente poder mental puede concentrarse en medio del tumulto o, como Virginia Woolf: tener suficiente con algo de dinero y un cuarto propio.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario